Créditos online
Los créditos online se presentan como tu mejor solución de financiación cuando te encuentras ante un apuro o cuando quieres disponer de un dinero al que recurrir en caso de necesidad.
WiZink préstamos personales
- 3.000€ hasta 30.000€
- Duración: 1 Año hasta 8 Años
- Edad Mínima: 18 años
- Acepta ASNEF
Préstalo préstamos personales
- 1501€ hasta 50.000€
- Duración: 1 Año hasta 7 Años
- Edad Mínima: 18 años
- Acepta ASNEF
Welp préstamos personales
- 501€ hasta 3.000€
- Duración: 1 Mes hasta 2 Años
- Edad Mínima: 18 años
- Acepta ASNEF
Bank Norwegian préstamos personales
- 500€ hasta 50.000€
- Duración: 1 Mes hasta 6 Años
- Edad Mínima: 23 años
- Acepta ASNEF
.
Pueden ser tu única opción cuando, además de tener esos problemas económicos, te encuentras en ASNEF y ves cómo muchas puertas se te cierran.
Créditos online, ¿qué son?
Créditos online son aquellos que solicitas de forma rápida, sin moverte de casa, sin apenas papeleo y desde pequeñas a grandes sumas de dinero.
Sus características:
- Solicitud online, muy sencilla y rápida.
- Estudian tu perfil lo antes posible, para conseguirte el importe de tu crédito enseguida. Por tanto, no necesitas muchos requisitos.
- El importe va en una escala muy amplia, desde los 50 hasta los 6000 euros.
Las financieras que están detrás de este tipo de créditos han ido surgiendo en los últimos años, como solución alternativa a la banca tradicional, más exigente con sus estándares y más lenta en el proceso de concesión del crédito.
Funcionan las 24 horas, todos los días de la semana. Puedes contactarles incluso durante los fines de semana y festivos y te contestan en cuestión de un día.
Además, gracias a las nuevas tecnologías y a herramientas como Instantor, pueden verificar tu identidad y tu historial crediticio sin necesidad de presentar demasiados documentos.
No te piden avales ni garantías y se muestran comprensivos con la gente que está pasando una mala racha y está incluida en ASNEF por problemas de deudas anteriores.
Créditos online en 15 minutos
Los créditos rápidos online, por extraño que te parezca, necesitan un periodo muy breve de estudio y validación. Por eso, recibes el dinero de forma urgente.
Aunque lo normal es que tarden alrededor de 24 horas, es posible que te llegue un correo electrónico de aprobación tan solo 15 minutos después de haber presentado tu solicitud.
A partir de ahí, lo único que tienes que hacer es leer con atención el contrato que te envían, firmarlo y devolvérselo por correo electrónico. Junto con la documentación que te puedan pedir.
Su oferta es muy amplia y seguro que puedes encontrar algún producto de este tipo que se adapte a tus necesidades.
Lo mejor es que revises todas las opciones disponibles en el mercado en esta comparativa:/
Requisitos para conseguir créditos rápidos online
El proceso para conseguir créditos rápidos online es el siguiente:
- Entras en la web de la financiera.
- Seleccionas el importe que deseas, el número de mensualidades para devolverlo o el importe de cada mensualidad que vas a pagar.
- La página te lleva a un formulario, que tienes que rellenar con tus datos personales y facilitar alguna documentación.
- En un plazo de 24 horas, tras estudiar tu solicitud, recibes una respuesta en tu correo electrónico.
- Lees y firmas el contrato que te adjuntan y envías lo que te piden (hay casos en los que te la reclaman cuando rellenas el formulario y otros en los que esperan hasta la concesión del crédito).
- Recibes el importe en tu cuenta en un plazo máximo de 3 días hábiles.
No obstante, la oferta de este tipo de productos es muy amplia por lo que, antes de proceder a su solicitud, te conviene analizar todas las opciones disponibles. Así estarás seguro de que el crédito online que vas a pedir es el que mejor se adapta a tus necesidades y te ofrece mejores condiciones.
También tienes la posibilidad de realizar varios cálculos en la web de la financiera, mediante su calculadora de préstamos online. Te permite barajar distintas opciones de cantidades, plazos e importe de mensualidades, para saber cuáles son los intereses que tienes que pagar en cada caso y los gastos totales a los que asciende tu crédito online.
Existe la opción de que estés incluido en ASNEF o algún otro fichero de morosos. No te preocupes, porque también puedes solicitar créditos online. Es posible que los gastos se incrementen un poco más, puesto que los prestamistas se quieren asegurar de que van a poder cobrar el dinero que te prestan, aunque tengas un mal historial crediticio. Asegúrate de examinar bien las opciones disponibles entre las distintas entidades que ofrecen este tipo de crédito.
Pedir créditos online, ¿es seguro?
Por supuesto que los créditos online son seguros, además de cómodos, fáciles y rápidos.
Existen compañías, como Vivus o Creditosi, que llevan bastantes años en el mercado. Si bien es cierto que hay otras que es posible que puedan ofrecerte cierta desconfianza.
Por eso, existen algunas cosas en las que puedes fijarte para saber si estás eligiendo un prestamista de confianza:
- Sus datos legales y de contacto aparecen bien visibles en su página web. Esto es indicativo de transparencia.
- Cuidan la atención al cliente y ofrecen varios canales de comunicación: web, redes sociales, teléfono, etc.
- Las opiniones de los usuarios que han utilizado sus productos son buenas.
- Aparecen en los rankings de páginas del sector como empresas bien valoradas.
Aun así, en caso de que no te sientas cómodo, no te olvides de que puedes elegir otra, porque la oferta es muy amplia.
Créditos online y préstamos online
¿Crédito o préstamo: cuál elijo? La pregunta te puede surgir, dado que no es fácil tener claros ambos conceptos.
Está claro que, si no conoces la diferencia entre ambos, no vas a poder elegir aquello que más te interese. No sabrás con exactitud qué es lo que buscas y, por tanto, es posible que pidas un producto que no es adecuado para tus necesidades o que no te ofrece las mejores ventajas.
Crédito
Un crédito es similar a una cuenta bancaria, en la que tienes un saldo que es el máximo que te puedes gastar y del que puedes disponer, según te va haciendo falta.
No obstante, no es un dinero que te pertenezca, sino que lo tiene la entidad. De este modo, tú solo tienes que pagar por aquello que gastas y no por el total.
Por supuesto, está sujeto a un interés determinado, que también debes añadir a la cantidad que hay que devolver.
Préstamo
Un préstamo es un dinero que la entidad te da en su totalidad, para que te lo administres como quieras. De este modo, como todo el dinero pasa a ser de tu propiedad, tienes que devolverlo todo, más los intereses.
Es importante que elijas solo la cantidad exacta que necesitas (o la más aproximada, al menos), porque no te merece la pena pedir de más y tener que aumentar tu deuda con los intereses.
La devolución se realiza en pagos mensuales.
Diferencias entre crédito y préstamo
- El préstamo está pensado para una cantidad específica de dinero. El crédito es una suma que puedes usar o no, porque solo pagas por lo que te hace falta.
- El préstamo es para un periodo medio o largo. El crédito es más adecuado para un plazo de devolución corto, porque los intereses son más altos.
- El préstamo está pensado para comprar productos o bienes de consumo. El crédito es para lo que tú quieras.
- El préstamo te llega a tu cuenta. El crédito lo tienes mediante una tarjeta y cuenta asociadas.
- El crédito es como una “hucha” que sabes que está ahí, por si te hace falta. El préstamo lo pides para una necesidad real que tengas en ese momento y que estés seguro de que lo vas a gastar en su totalidad.
¿Cuándo pedir un préstamo?
Imagina que te quieres dar el capricho y comprarte un coche nuevo o arreglar el que tienes o hacer alguna reforma o pagar la matrícula de la universidad. Sin embargo, no tienes ahorrado todo el dinero que te hace falta y necesitas una inyección de efectivo rápida que te ayude a pagarlo.
Es necesario que sepas con exactitud lo que te cuesta y lo que necesitas, para que no pidas de más y luego se te encarezca con los intereses.
También necesitas saber el tiempo que vas a tardar en poder devolverlo y a cuánto asciende la mensualidad que te puedes permitir. En este caso, si no lo tienes claro utiliza el simulador de préstamos que las financieras tienen en su web. Podrás estudiar diversas opciones y ver cuál es la que más se te ajusta.
Están pensados para cantidades a partir de 6000 euros, que pueden llegar a los 15000 o 20000 euros.
¿Cuándo pedir un crédito?
En el caso del préstamo, todo lo tienes claro. En el caso del crédito, están más recomendados para cuando reinan las incertidumbres: sabes que necesitas dinero, pero no sabes con exactitud cuánto ni durante cuánto tiempo.
También son adecuados cuando lo que quieres es un colchón de financiación, un “por si acaso” al que recurrir en caso de necesidad y que te hace sentirte más tranquilo sabiendo que está ahí y que no te vas a quedar sin dinero.
Puesto que solo pagas lo que necesitas, no pasa nada porque lo tengas esperando hasta que llegue ese momento. Por eso, los importes son menores de 6000 euros.
Clases de préstamos online
Estas son las opciones entre las que puedes elegir a la hora de pensar en préstamos online:
- Micropréstamo: cuando lo que necesitas son cantidades muy pequeñas de efectivo, por ejemplo, para pagar algún recibo urgente o cuando te surge alguna pequeña emergencia.
- Préstamo online sin papeleos: para cantidades un poco más grandes, pero con las mínimas complicaciones.
- Préstamo para estudiantes: necesitas pagar la matrícula de la universidad de tus hijos o quieres volver a estudiar, pero, con el precio que tienen hoy en día los grados y másteres, es complicado. Por eso, recurres una pequeña inyección de dinero para ayudarte.
- Préstamo para viajar: ¿te imaginas poder hacer el viaje de tus sueños? Llevas mucho tiempo ahorrando, pero no te llega. Cuando no puedas esperar más para darte ese capricho, piensa en un préstamo de este tipo. Luego, puedes devolver el dinero de forma cómoda, adaptada a tus posibilidades.
- Préstamo para tu boda: se acerca el gran día, por fin vais a dar el paso, pero estáis un poco cortos de dinero. No queréis escatimar en un día tan especial, así que ¿por qué no te planteas pedir un préstamo? Toda ayuda es poca para una ocasión como esta.
- Préstamo para financiar tu coche: se te acaba de estropear el que tienes y el taller te pide mucho dinero por arreglarlo. No merece la pena, con los años que tiene. Sin embargo, tampoco puedes permitirte comprarte otro nuevo. ¿Qué haces? Pues, pedir un préstamo para ayudarte a salir del apuro. Lo devuelves en pequeñas mensualidades, durante el tiempo que necesites.
- Préstamos rápidos a largo plazo: para cantidades más elevadas, dispones de meses o, incluso, años para devolverlo. Están pensados para cuando tienes algún problema con tu empresa y una solución de este tipo te puede evitar la quiebra.
Clases de créditos online
Ya conoces la diferencia entre préstamos y créditos online, así que sabes cuándo pedir uno y cuándo pedir otro.
Ahora, te presentamos las distintas alternativas que tienes dentro de los créditos:
- Microcrédito: para cantidades muy pequeñas, que se suelen devolver en un solo pago.
- Crédito online sin papeleos: tienes el dinero en tu cuenta en cuestión de 24-48 horas, para lo que quieras, sin tener que dar explicaciones.
- Crédito rápido: en este caso, son de importes entre 500 y 5000 euros. Cuando quieres darte un capricho.
- Crédito personal urgente: también son muy rápidos, pero están más indicados para cantidades más elevadas (hasta 5000 euros).
- Crédito para empresas y autónomos: si bien los demás están dirigidos a personas físicas, estos son exclusivos para empresas. Es tu opción de conseguir la financiación que necesitas para seguir adelante con tu negocio, emprender, reformar o ampliar tu oficina, etc.
- Crédito para vivienda: cuando quieras reformar tu vivienda o alquilarte un piso más grande, en un barrio mejor.
- Líneas de crédito: en este caso, se trata de un colchón disponible por si necesitas algún dinero. No tienes pensado nada en concreto ni sabes cuándo lo vas a gastar. Pero quieres tener esa seguridad de que puedes recurrir a él. Pagas lo que vayas gastando y se va renovando de manera automática, en una cuenta virtual.
Líneas de crédito tradicionales
Las líneas de crédito son una especie de cuenta corriente virtual en la que dispones de un saldo que puedes gastar como más te convenga, según tus necesidades.
A medida que lo vayas devolviendo, dispones de nuevo de la misma cantidad y solo tienes que pagar por lo que vas retirando.
Para que te concedan una línea de crédito, debes tener un historial crediticio impecable. Más aun tratándose de la banca tradicional, que es muy escrupulosa con sus requisitos y realizan un estudio de tu perfil en profundidad.
Esto supone, no solo que no te van a conceder un crédito estando en ASNEF, sino que el tiempo que van a tardar en entregarte el dinero va a ser muy superior al de cualquier financiera online.
Diferencia entre créditos online y créditos tradicionales
Como ya supondrás, son varias las diferencias entre ambas líneas de crédito:
- Gestión: la de los créditos online es mucho más fácil y rápida, además de cómoda. La puedes realizar desde cualquier lugar con acceso a internet, con una comparativa de préstamos personales en pocos minutos. Luego, rellenas su formulario y estudian tu perfil en muy poco tiempo.
- Rapidez: como el estudio de tu solicitud de crédito online es muy rápido, la concesión también lo es y recibes tu dinero en cuestión de 24 o 48 horas. No obstante, te comunican su decisión en un plazo de unos 15 minutos.
- Fidelidad: algunos prestamistas te conceden el primer crédito gratis. Sin embargo, hay muchas otros que premian tu fidelidad y, a medida que solicitas este tipo de productos y pagas tus deudas a tiempo, obtienes mejores condiciones.
- Sin aval ni garantías: algunas financieras online no te solicitan este tipo de documentos.
- Sin justificación: no hace falta que des explicaciones sobre los motivos que te llevan a pedir el dinero. Sin embargo, en los bancos sí que tienes que darlas.
- Cantidad: lo normal es recurrir a entidades tradicionales para solicitar importes más elevados. Cuando piensas en una cantidad pequeña (menos de 1000 euros), que puedes devolver en poco tiempo, piensas en un crédito online. Sin embargo, también hay entidades online que te ofrecen hasta 6000 euros.
- Con ASNEF: en los bancos, es impensable que te acepten si tienes ASNEF. En las financieras online, sí que es posible.
- Negociación del plazo: el banco es más estricto con este aspecto. Un prestamista online te puede permitir una prórroga, aunque te cobre intereses a cambio.
Reembolso de tu crédito online
Los créditos online se otorgan a personas que necesitan dinero de forma rápida y fácil.
Además, en ocasiones, es probable que esta situación se haya mantenido en el tiempo. Cuando esto ocurre, las posibilidades de endeudamiento aumentan y se ven inmersas en ASNEF o en otros ficheros de morosos por no poder pagar sus deudas a tiempo.
Para evitar este último paso, o, incluso ser denunciado por la financiera, lo mejor es que contactes con ellos y seas sincero.
Cuando te das cuenta de que va a llegar la fecha de pago de tu siguiente cuota y no tienes dinero suficiente, llámales y explícales tu caso. Lo normal es que te propongan una fecha alternativa, extendiéndote el plazo de pago.
No obstante, ten en cuenta que esto lleva aparejados unos gastos. Puedes salir de un apuro momentáneo, pero tienes que pagar los intereses de demora, que son elevados.
En caso de que no se lo notifiques y te envíen una nota de pago, también tienes que pagar una comisión por no tener dinero disponible en ese momento.
Por eso, es una solución para usar en caso de apuro, pero no algo que puedas hacer de forma recurrente. No resulta bueno para ti, porque tus gastos aumentan.
Cuando firmes el contrato de tu crédito, asegúrate de que las fechas de pago y el importe de las mensualidades son realistas y que les vas a poder a hacer frente sin problema. Por supuesto, un imprevisto es un imprevisto y nadie está libre.
Preguntas frecuentes sobre Créditos online
Rellenando el formulario de la web de la financiera. Por ejemplo, Creditea.
Incluyes tus datos personales, la cantidad que necesitas, el plazo de devolución y los documentos que te soliciten. Luego, esperas unos minutos y recibes un email, confirmándote su aprobación.
Tus mejores opciones para conseguir inversiones rentables son:
- Bonos y Letras del Estado.
- Bienes inmuebles.
- Fondos de inversión.
- Bolsa.
- Criptomonedas.
- Startups.
- Crowdlending.
- Forex.
¿Qué crédito te convienen?
Compara todas los créditos según el tipo de interés y el plazo, examinando nuestro resumen