Créditos rápidos
Los créditos rápidos son tu solución para ese problema puntual de financiación que necesitas resolver de forma urgente, cuando tu cuenta bancaria no pasa por su mejor momento y no tienes suficiente liquidez.
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Imagina que el recibo de la luz te va a llegar en los próximos días o que quieres hacer un regalo especial de cumpleaños o que tienes un pequeño problema de salud que no puede esperar. No se trata de mucho dinero, pero, en este momento, no tienes suficiente en tu cuenta corriente para hacerle frente a esos pagos.
Antes, era un problema horrible. Cuando la única forma de conseguir financiación era pedir un préstamo a los bancos, nunca conseguías el dinero urgente. Son muy exigentes, piden muchos requisitos y esto implica que tardas mucho tiempo en preparar la documentación que te piden y ellos en estudiarla.
Ahora, es muy sencillo conseguir préstamos rápidos, gracias a las financieras online que llegan donde la banca no lo hace, ofreciendo soluciones de financiación urgentes.
A continuación, te explicamos cómo puedes solucionar tus problemas más inmediatos de efectivo, explicándote las diferencias entre varias formas de financiamiento, para que sepas a cuál recurrir en cada ocasión. Te informamos sobre el concepto de los créditos rápidos y fáciles, sus características, ventajas e inconvenientes y cómo y dónde puedes solicitar un préstamo urgente.
También aprovechamos para aclararte la confusión que hay entre las 2 formas más comunes de pedir dinero prestado, como son los préstamos y los créditos y cómo solicitar financiación con ASNEF.
Créditos urgentes, ¿en qué consisten?
Los créditos rápidos son los que solicitas por internet, sin moverte de casa, sin papeleos y que reciben aprobación en pocos minutos. Suelen ser por pequeñas cantidades, pero no siempre.
¿Recuerdas cuando, para pedir un crédito, tenías que ir en persona a tu entidad bancaria y esperar semanas para saber si te lo concedían? Te pedían un montón de documentos y tardaban mucho en estudiar tu solicitud.
En los últimos años, las cosas han cambiado, gracias a las financieras online que han ido apareciendo como competencia a la banca tradicional.
Ahora, puedes recibir créditos urgentes en cuestión de minutos. Las prestamistas están disponibles 24 horas, durante los 7 días de la semana, y realizan tu identificación con herramientas como Instantor. Esto posibilita que, en poco tiempo, puedan analizar tus ingresos y tu perfil crediticio. Y, todo ello, sin que te muevas de casa.
Además, no necesitas aval ni garantía y tienen varias modalidades.
Créditos rápidos y fáciles: características
Las características más destacadas de este tipo de préstamo son:
- Realizas la solicitud online: es bastante sencilla y apenas tienes que aportar documentación.
- Como son créditos online sin papeleos, recibes respuesta en tan solo 10 o 15 minutos.
- Puedes pedir desde 50€ hasta 6.000€, según la entidad a la que recurras y tus necesidades.
- Como el importe no es elevado, el plazo de devolución es corto.
- La TAE suele ser alta, debido a que se trata de un dinero instantáneo, con pocos requisitos. Esto dispara el riesgo de impago.
Cuando necesitas cantidades mayores y no te corre tanta prisa, puedes plantearte otros productos, como los créditos o los créditos personales. En ese caso, los intereses van a ser más bajos, pero también vas a tener que esperar algo más para recibir el dinero.
Cualquiera que sea tu solución de financiación, debes saber que está regulada por la Ley 22/2007, Comercialización a distancia de servicios financieros destinados a los consumidores. En ella se recogen todos tus derechos como deudor o prestatario.
Pedir un crédito rápido
La tramitación de los créditos al instante se realiza online y tienes 2 opciones:
- Buscar en Google todas las páginas de todas las prestamistas e ir mirando una a una, a ver qué te ofrecen.
- Acudir a un comparador, que reúne las principales ofertas de las mejores empresas crediticias, para que elijas la que más te interesa.
En cualquier caso, cuando examines todo y te hayas decidido, vas a tener que presentar una solicitud. Se trata de un formulario muy básico, donde te van a pedir los siguientes datos:
- Importe del préstamo instantáneo.
- Plazo de devolución.
- Nombre y DNI, pasaporte o NIE.
- Dirección postal y electrónica.
- Número de móvil.
- Número de cuenta bancaria.
- Situación laboral.
- Ingresos netos mensuales.
- Motivo para el que solicitas el dinero.
Esto último, es posible que algunas financieras no lo pregunten, ya que no suelen pedir explicaciones.
Requisitos de los créditos al instante
Los requisitos que debes cumplir para garantizarte la concesión de los créditos al instante son:
- Ser mayor de edad, aunque algunas entidades exigen tener un mínimo 21 años.
- Residir en España.
- Disponer de ingresos regulares.
Existen muchas financieras online que conceden financiación con ASNEF. No obstante, es mucho más fácil cuando tu historial crediticio está impecable y careces de deudas anteriores. Esto te facilita las cosas y, también, te reduce el interés.
¿Cómo te pueden conceder tu crédito instantáneo tan deprisa?
En cuestión de 10 o 15 minutos y, a veces, menos, recibes un correo electrónico comunicándote tu aprobación. Es posible que te adjunten el contrato o que tengas que aportar alguna documentación, si no te la reclamaron en el proceso de solicitud.
El motivo de que sean tan rápidos es que pueden examinar tu identidad, tu solvencia económica y tu perfil en tiempo real, gracias a las nuevas tecnologías. La herramienta Instantor consigue que todo sea más fácil y agiliza más los trámites, en lugar de tener que pedirte que aportes toda la documentación que te solicitan los bancos, que entorpece y ralentiza el proceso.
Cuando les envías el contrato firmado, te abren la cuenta y, en 2 o 3 días, puedes disponer del dinero.
Al pedir crédito rápido, ¿debes decir el motivo?
Esto es algo que varía, en función de la entidad financiera. En muchos de los formularios de solicitud está incluido como una pregunta obligatoria y, en otros, no.
En cualquier caso, no debe ser lo que más te preocupe. No se trata de invadir tu privacidad. Al contrario, cuando les explicas las cosas puedes contribuir a que empaticen contigo y comprendan mejor tu situación. Por tanto, te puede beneficiar.
Crédito al instante, ¿dónde solicitarlo?
Existen numerosas entidades financieras online que te van a ofrecer préstamo rápido. De hecho, la oferta es tan abundante que puede llegar a resultar abrumadora.
Requiere mucho tiempo por tu parte poder estudiarlo todo, acudiendo a Google u otro buscador y entrando, página a página, a todas las entidades para saber qué productos ofrecen, cuáles son los más adecuados para ti y cuál de ellas se presenta como la mejor alternativa, según sus condiciones.
Con la intención de ayudarte, hemos preparado una tabla comparativa de créditos rápidos. En ella, hemos recogido los datos de las mejores financieras y te lo presentamos todo de una forma muy visual, para que puedas distinguir de un rápido vistazo las propuestas de importes, intereses y plazos de cada una.
Analiza con atención todos los detalles, para que puedas elegir con seguridad la que se ajusta más a tus necesidades.
Cuando lo tengas claro, una vez que entres en su página y antes de rellenar la solicitud, puedes realizar una simulación de cantidades y plazos, gracias a su simulador de préstamos.
Crédito online
El crédito es una forma de financiación por la cual te conceden un dinero, que puedes usar mediante una tarjeta. No lo tienes en tu cuenta bancaria, pero dispones de él. Lo pagas en cuotas, según lo que gastes y solo abonas intereses y comisiones por el importe que usas.
Crédito o préstamo online es aquel que solicitas por internet a una prestamista. Es mucho más fácil y rápido que solicitar un crédito a un banco.
Esta financiación está pensada para una persona física o una empresa.
Modalidades del crédito por internet
Los créditos online tienen muchas variedades para satisfacer distintas soluciones financieras:
- Minicréditos online: adecuados cuando necesitas una cantidad muy pequeña de dinero. Como es tan poco dinero, la devolución del importe del préstamo no se realiza en cuotas sino en un pago único.
- Crédito online sin papeleos: no necesitas dar explicaciones sobre los motivos que llevan a solicitarlo y dispones del dinero en un pequeño margen de entre 24 y 48 horas.
- Crédito rápido: indicado para importes de entre 500 y 5000 euros. Te lo explicamos más en profundidad, a lo largo de este artículo.
- Crédito para vivienda: cuando no puedas esperar para reformar tu casa, alquilarte otro piso más grande, en un barrio mejor, etc.
- Líneas de crédito: son como una hucha, un colchón disponible por si necesitas dinero extra en un momento dado, que aún no tiene fecha. No tienes pensado nada en concreto, pero quieres tener la seguridad de que puedes recurrir a él.
- Créditos personales: solicitar un préstamo personal también es muy rápido y sencillo. Están indicados para esas necesidades de capital más grandes (hasta 5.000€), que puedas tener en un momento dado.
- Crédito para empresas y crédito para autónomos: todas las demás opciones de esta lista están pensadas para las personas físicas, pero estos 2 casos son exclusivos para la financiación de las empresas. Es tu opción de conseguir la inyección de capital que tu negocio necesita para seguir adelante, emprender, reformar o ampliar tu oficina, etc.
¿Sabes ya qué tipo de crédito, minicrédito o préstamo estás buscando?
Diferencia entre crédito por internet y crédito tradicional
Se trata de opciones de financiación distintas, aunque te puedan parecer que son lo mismo:
- Gestión: solicitar online es más fácil, rápido y cómodo. Puedes hacerlo desde cualquier punto con acceso a internet y, además, comparando multitud de opciones en pocos minutos.
- Rapidez: no te suelen pedir muchos requisitos, así que las entidades financieras online estudian tu solicitud muy rápido, en pocos minutos. Esto explica por qué recibes el dinero de forma rápida, en cuestión de 24 o 48 horas.
- Fidelidad: hay entidades que te conceden el primer crédito online gratis, al 0% de intereses, para captarte como cliente. Otras premian tu fidelidad y te ofrecen mejores intereses cuando ya eres cliente habitual.
- Sin aval ni garantía: a veces, no son imprescindibles. Depende del producto concreto y la entidad.
- Sin justificación: a nadie le interesa para qué quieres el dinero, excepto a los bancos, que te lo piden como algo obligatorio.
- Cantidad: cuando piensas en una cantidad pequeña, de menos de 1000 euros, que vas a devolver en poco tiempo, lo mejor es solicitar el dinero online, no en un banco. No obstante, las fintech llegan a conceder préstamos de hasta 90.000€.
- Con ASNEF: los bancos nunca van a aceptar ASNEF. Un historial crediticio con deudas supone un cliente de riesgo y no lo quieren. En las financieras online, sí que puedes conseguir productos interesantes, creados en especial para estos colectivos.
- Negociación del plazo: el banco es más estricto. Un prestamista online te concede prórrogas, aunque te va a cobrar intereses de demora.
Préstamos y créditos: qué son y en qué se diferencian
Crédito y préstamo son tus opciones para solicitar dinero prestado, cuando careces de suficiente efectivo para llevar a cabo tus proyectos o algún gasto inesperado.
Son cosas distintas, que te conviene conocer, para saber cuándo recurrir a cada una de ellas.
¿Cuándo te conviene pedir un crédito?
El crédito está recomendado cuando no tienes las cosas claras. Sabes que necesitas dinero, pero no tienes seguridad sobre cuánto o durante cuánto tiempo.
Es posible que solo lo quieras para tu paz mental, cuando te ves muy apurado. Lo consideras como un colchón de financiación al que puedes recurrir, en el supuesto de que lo necesites. Por si acaso. Te sientes más tranquilo sabiendo que está ahí, por si te hace falta.
Por tanto, es posible que no tengas un gasto concreto que hacer en ese momento. O que lo tengas, pero no sepas cuánto dinero necesitas, porque aún no has averiguado cuánto te va a costar. Por ejemplo, vas a ir al médico, pero no sabes lo que te van a cobrar. O te han invitado a una boda, pero no sabes lo que vas a regalar.
Teniendo en cuenta que solo vas a pagar por la cantidad que te gastes, no pasa nada porque lo tengas apartado, hasta que llegue esa ocasión. Por eso, están pensados para importes menores de 6.000 euros.
¿Cuándo te conviene pedir un préstamo?
Los préstamos están más indicados para cuando te quieres dar un buen capricho, por ejemplo, y comprarte un coche nuevo o realizar un viaje.
Aunque también puedes solicitar un préstamo para arreglar el coche viejo que tienes o hacer alguna reforma o pagar la matrícula de la universidad. Es decir, gastos más habituales del día a día, para los que necesitas una ayuda. No tienes ahorrado todo el dinero que te va a costar y pides prestado efectivo de forma rápida, para poder pagarlo.
En tu mente tienes ya el gasto concreto que vas a hacer. Sabes el dinero que quieres y en qué lo vas a emplear.
También debes plantearte el plazo de devolución y cuál va a ser tu cuota mensual. Es fácil, sabiendo a cuánto ascienden los intereses, tanto TIN como TAE, y utilizando un simulador de préstamos. Puedes estudiar diversas opciones y ver cuál es la que más se te ajusta.
Los préstamos están pensados para cantidades a partir de 6000 euros, que pueden llegar a los 50000€ o más. Es decir, para cantidades mayores que el crédito.
En el caso de los préstamos personales, están indicados para una persona física. Pero también hay préstamos para autónomos o empresas.
¿Cuándo te conviene pedir un préstamo?
Los préstamos están más indicados para cuando te quieres dar un buen capricho, por ejemplo, y comprarte un coche nuevo o realizar un viaje.
Aunque también puedes solicitar un préstamo para arreglar el coche viejo que tienes o hacer alguna reforma o pagar la matrícula de la universidad. Es decir, gastos más habituales del día a día, para los que necesitas una ayuda. No tienes ahorrado todo el dinero que te va a costar y pides prestado efectivo de forma rápida, para poder pagarlo.
En tu mente tienes ya el gasto concreto que vas a hacer. Sabes el dinero que quieres y en qué lo vas a emplear.
También debes plantearte el plazo de devolución y cuál va a ser tu cuota mensual. Es fácil, sabiendo a cuánto ascienden los intereses, tanto TIN como TAE, y utilizando un simulador de préstamos. Puedes estudiar diversas opciones y ver cuál es la que más se te ajusta.
Los préstamos están pensados para cantidades a partir de 6000 euros, que pueden llegar a los 50000€ o más. Es decir, para cantidades mayores que el crédito.
En el caso de los préstamos personales, están indicados para una persona física. Pero también hay préstamos para autónomos o empresas.
Créditos rápidos con ASNEF
Como te hemos explicado, tienes 2 opciones principales muy diferentes para solicitar financiación: crédito y préstamo. Cada una, con sus variantes y con la posibilidad de pedirlas en un banco o en una financiera online.
Implican formas muy distintas de conseguir dinero, con distintas condiciones, indicaciones y requisitos.
Entre los requisitos que las diferencian está el tema de las deudas previas y la posibilidad de que te hayas visto incluido en ASNEF.
Los créditos con ASNEF son un producto financiero que no existe en España. No te lo van a conceder ni en un banco ni en una financiera online, incluso aunque estas son mucho más permisivas.
Por tanto, aunque se habla mucho en distintas páginas de internet sobre el crédito rápido o instantáneo con ASNEF, nadie te va a dar dinero de esta forma. Lo que puedes pedir son préstamos con ASNEF, en sus distintas modalidades.
Aun así, los bancos van a seguir sin otorgarte el dinero. Aquí es donde entran las fintech para ofrecerte soluciones. La mayoría de las financieras online acepta ASNEF.
Por tanto, puedes conseguir financiación estando en ASNEF, aunque lo mejor es hacer lo posible por saldar tus deudas, sanear tu economía y salir del fichero de morosos.
Es la forma más fácil de conseguir préstamos online de cualquier tipo e importe y con mejores condiciones.
¿Por qué hay préstamos rápidos con ASNEF y no crédito instantáneo con ASNEF?
El motivo deriva de la naturaleza del crédito, que es una financiación recurrente.
Con una tarjeta, por ejemplo, tienes unas fechas acordadas. En ese momento, te cargan la cantidad que has gastado, con sus intereses y comisiones. A medida que vas gastando, vas devolviendo esa parte del dinero con sus costes. Pero, a principio de mes, siempre tienes más disponible, aunque no hayas pagado lo que te gastaste el mes anterior.
Por tanto, pidiendo 1.000€, puedes tener 1.000€ disponibles cada mes. ¿Te imaginas a cuánto puede ascender la deuda? Es más, ¿te imaginas lo difícil que te va a resultar pagarla, teniendo en cuenta que pides prestado porque no tienes dinero suficiente para cubrir tus gastos?
Sin embargo, el importe del préstamo te lo dan en un solo pago, una sola vez. Cuando lo gastes, ya no vuelve a estar disponible. No cuentas con más financiación.
En este caso, la deuda es mucho menor. Son 1.000€, más el TIN y la TAE que te cobre la entidad. Nada más.
Por eso, el riesgo que supone es menor y es más fácil que muchas financieras online te concedan un préstamo con ASNEF, pero no un crédito con ASNEF.
Créditos rápidos y minicréditos online, ¿son lo mismo?
Ambos productos se parecen, porque los puedes solicitar online y recibes el dinero de forma rápida. Sin embargo, existe una diferencia en lo que al importe se refiere.
Los microcréditos o minicréditos están pensados para cantidades muy pequeñas, de hasta 1.000 euros, aunque lo más habitual son 300€.
Cuando quieres pedir financiación rápida, es porque necesitas importes más elevados, que rondan los 6.000€, aunque pueden ser menos.
De hecho, para pequeños importes se pueden solicitar de forma indistinta, según las condiciones que te sean más ventajosas y lo que tarden en concederte el dinero.
Créditos urgentes sin nómina
Es posible que necesites un préstamo rápido sin nómina y debes saber que no vas a tener problema alguno para que te lo concedan.
Los préstamos rápidos online requieren que tengas ingresos recurrentes, pero no es obligatorio que estos provengan de una nómina.
Puedes ser autónomo, jubilado, discapacitado físico, desempleado, etc. y disponer de unos ingresos regulares que provengan de tus clientes o de la pensión o subsidio que recibes. De hecho, tan solo los trabajadores por cuenta ajena son los que perciben sus ingresos a través de una nómina.
En algunos casos, según la entidad, cuando no dispongas de ingreso alguno es posible que te concedan créditos al instante presentando algún aval, como pueda ser un coche. No es lo más habitual, pero, cuando se trata de importes pequeños, es probable que lo acepten.
Créditos rápidos y fáciles: ¿para qué situaciones están recomendados?
Los créditos al instante están planteados para necesidades urgentes de dinero, de forma fácil y sencilla. Esta necesidad de financiación debe ser algo puntual y no recurrente, para no caer en la tentación de pedir un préstamo detrás de otro. Además, son cantidades pequeñas.
Por tanto, este tipo de préstamos rápidos son ideales para:
- Ocasiones especiales, como Navidad o cumpleaños, cuando necesitas comprar algo urgente, pero es posible que no estés atravesando por tu mejor momento. No necesitas mucho y la deuda que contraes no es muy grande.
- Consultas médicas, por problemas de salud que necesitas atender y que no pueden seguir el ritmo de las enormes listas de espera.
- Multas de tráfico. Cuando las pagas enseguida te reducen la cantidad. Por tanto, quizá te merece la pena pedir un préstamo instantáneo y ahorrarte ese dinero. Es algo que debes valorar, según tus circunstancias.
- Reparaciones de electrodomésticos, coches o averías en casa. Los imprevistos más normales que puedes tener. Suelen ocurrir cuando menos los esperas. Por tanto, es posible que necesites financiación para solventar el gasto y que te haga falta el dinero urgente.
- Pagar facturas: un dinero rápido ayuda con los recibos que llegan, todos a la vez. A lo mejor, aún no has cobrado tu nómina y no les puedes hacer frente. Tampoco te puedes retrasar con el pago, así que necesitas una solución ya.
Cuando se trata de importes más elevados, plantéate un crédito al consumo, por ejemplo.
Devuelve tu crédito instantáneo
Dependiendo del importe de los préstamos rápidos, puede resultarte asequible pagar en una única cuota. Esto ocurre, por ejemplo, cuando eliges un vencimiento a 30 días.
El pago se realiza mediante transferencia bancaria o con una tarjeta de débito.
Cuando el plazo de vencimiento es superior y divides los pagos en cuotas mensuales, puedes utilizar la domiciliación bancaria como forma de pago.
¿Qué pasa si no devuelves tu crédito rápido?
Cuando llega el momento de hacer efectiva la devolución de tus préstamos rápidos y no puedes hacerle frente a esa deuda, lo mejor es que hables con el prestamista e intentes negociar una nueva fecha. Es posible que te conceda una prórroga, con un nuevo día para pagar la mensualidad.
En cualquier caso, vas a incurrir en intereses de demora por haberte retrasado, lo cual va a incrementar tu deuda.
Bien sea por despiste o porque no te has atrevido o por el motivo que sea, cuando no le avisas y no recibe su dinero en la fecha acordada, tu deuda aumenta aún más. El motivo es que te va a enviar un aviso de pago, por el que te puede llegar a cobrar hasta 20€ de comisión.
En el supuesto de que te haga los requerimientos oportunos y, aun así, no pagues, te va a incluir en ASNEF, RAI o cualquier otra lista de morosos. Además, puede emprender acciones legales y reclamarte el dinero por vía judicial.
Por tanto, las consecuencias de no hacerle frente a tu deuda pueden llegar a ser muy graves. En el mejor de los casos, aumentan tus gastos y te perjudica a la hora de pedir futuros créditos. En el peor, te ves inmerso en juicios desagradables, que también incrementan tu deuda y, además, en ASNEF.
Nuestra recomendación es que intentes por todos los medios evitar llegar a esta situación tan desagradable y peligrosa.
¿Qué pasa si cancelas tu crédito urgente antes de tiempo?
Es posible que puedas llegar a reunir el dinero para pagar tus préstamos rápidos antes de la fecha acordada. Aunque lo mejor es que lo hagas, debes saber que también tienes que pagar una comisión.
El motivo es que, cuando la financiera te deja el dinero, se beneficia con los intereses que recibe cada mes. En el caso de que pagues antes de tiempo, va a dejar de lucrarse con esos intereses y, por tanto, su beneficio se reduce.
Por eso, a modo de indemnización, te carga una comisión.
Debes valorar el gasto que te supone cada cosa. Lo normal es que te compense más pagar la comisión que seguir con tus plazos y pagar los intereses.
El importe de la comisión está regulado en el 0,5%, para plazos inferiores a un año, y en el 1%, cuando se trata de un plazo de tiempo mayor.
Créditos urgentes: ventajas y desventajas
Los créditos al instante presentan varias ventajas, que ya has podido deducir, pero también tienen aspectos negativos que debes conocer.
Los créditos rápidos y sus ventajas
Los créditos rápidos y sus inconvenientes
Están indicados para personas con problemas económicos. Esta es la causa de que los intereses sean tan elevados, ya que se trata de clientes con un riesgo potencial muy alto.
Sin embargo, el motivo de que lo pidas es que tienes problemas económicos, por lo que es como un círculo vicioso: pides dinero, porque no lo tienes; pero, pidiendo el dinero, te endeudas aún más.
Preguntas frecuentes sobre créditos rápidos
Este tipo de préstamos online se contratan siempre a través de entidades fintech. Por tanto, hay que acudir a la página web de las prestamistas que los conceden o páginas especializadas.
Para ayudarte, hemos preparado una tabla comparativa de créditos rápidos, al inicio de este artículo. En ella, puedes examinar las distintas opciones que hay en el mercado.
Las entidades que conceden estos créditos rápidos son seguras, tanto desde el punto de vista de la informática, como desde el punto de vista de su solvencia y fiabilidad.
Incluso así, no está de más que tomes algunas precauciones y confirmes que estás accediendo a una página real. Para ello, puedes prestar atención a varios aspectos:
- Verifica que la dirección de internet de la página empieza por https://.
- Asegúrate de que, en la parte superior izquierda, en la barra de navegación, aparece el candado cerrado, que indica que accedes a una página segura.
- Debe contener las páginas de Aviso Legal y Términos y condiciones, escritas en castellano y sin faltas de ortografía.
- No te van a pedir cantidad alguna por adelantado.
- Deben figurar los datos de contacto reales (dirección y teléfono o email) y bien visibles.
- Toda la información de la entidad tiene que aparecer de forma clara y transparente.
Además, las empresas crediticias deben estar dadas de alta en el Registro Mercantil de Madrid o de la localidad donde operan. Cuando se trate de entidades financieras, es obligatorio que estén registradas en el Banco de España.
Muchas entidades ofrecen créditos urgentes para solucionar problemas puntuales de liquidez.
Todas ellas requieren de un proceso similar para hacer la solicitud:
- Lo primero para pedir préstamo es elegir la entidad más adecuada a tus necesidades. En la tabla comparativa de créditos rápidos de este artículo puedes analizar las distintas ofertas según la cantidad, el plazo de devolución que admiten, los intereses y comisiones que cobran, etc.
- El siguiente paso es indicar el importe que deseas recibir y el plazo de devolución que mejor te viene.
- Rellenar la solicitud, con tus datos personales, de contacto y cuenta bancaria.
Entre 5 y 15 minutos después, recibes un mensaje en tu teléfono o un email, informándote de que te lo han concedido y adjuntando un contrato.
Antes de firmarlo, léelo bien, para asegurarte de que todas las condiciones son correctas y evitar futuras sorpresas desagradables.
Una vez que lo has enviado, en 2 o 3 días puedes disponer del dinero.
Como norma general, los requisitos suelen ser:
- Vivir en España y tener más de 18 años. En algunos casos, debes ser mayor de 21 años.
- Ser titular de una cuenta corriente.
- Poder justificar algún tipo de ingreso, mediante una nómina, facturas de clientes, subsidio, pensión, etc.
- Aportar toda la información y la documentación que te pidan en la solicitud.
Al tratarse de importes bastante pequeños, tienes la ventaja de que las compañías que prestan este servicio no son muy exigentes con los requisitos necesarios para solicitar un préstamo.
No obstante, esto también supone que, a cambio de la celeridad, te cobran un interés elevado. Por tanto, es importante que valores la conveniencia de solicitar este producto, frente a otros disponibles.
Por último, hay que decir que los créditos rápidos se ofrecen solo a las personas físicas y no a empresas.
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