Préstamo de 60000 euros
Solicitar un préstamo de 60000 euros hoy en día ya no supone presentarse a un duro examen del que tienes que estar esperando varias semanas para saber la nota y que, al final, puedes suspender.
Ya no es necesario que dediques un montón de tiempo a preparar una cantidad enorme de documentación y que vayas de oficina en oficina bancaria, para ver quién se apiada de ti y te concede el dinero que necesitas.
Quieres comenzar tu negocio, mejorar las instalaciones del que ya tienes, arreglar la casa de la playa o comprarte una nueva. En definitiva, cumplir tus sueños. Y no quieres sentirte juzgado ni perder el tiempo.
Por eso, tu alternativa son los préstamos online de 60000 euros. Ya no es imprescindible recurrir a un banco, porque hay más entidades financieras que pueden ofrecerte la solución que necesitas de forma eficaz, sencilla y rápida.
¿Quieres saber cómo conseguir tu préstamo personal de 60000 euros sin someterte al yugo de la banca? A continuación, te explicamos cuáles son los requisitos, dónde lo puedes solicitar y en qué te debes fijar para contratarlo, además de aconsejarte sobre tu mejor sistema de financiación: préstamos o créditos.
60000 euros es una cantidad considerable. Debes tener un buen plan para gastarlos.
Cuando quieres asegurar una TAE más reducida y un plazo de devolución más amplio, acude a una entidad bancaria.
Obtienes una financiación más ventajosa a cambio de esperar varias semanas, presentar numerosos documentos y contratar otros productos que encarecen tu préstamo (como una cuenta nómina o un seguro).
Debido a que son muy rigurosos, la tasa de denegación del préstamo está muy por encima de las prestamistas online. Esto se hace más patente, a medida que pides préstamos o créditos mayores.
De hecho, para importes de 60000 euros, es muy difícil conseguir un préstamo bancario.
Las financieras online son famosas por sus mini créditos o mini préstamos online, pero muchas pueden llegar a los 60.000.
Son menos exigentes con sus requisitos: la mayoría acepta ASNEF y conceden préstamos sin nómina o sin aval.
Además, son más rápidas, porque el proceso de solicitud es más ágil, hay menos documentación y es más fácil estudiar tu expediente. Tampoco cobran comisión de apertura ni de estudio.
En definitiva, sopesa ambas alternativas en relación con tu situación actual. Cada una tiene su lado bueno y su lado malo. Según tus circunstancias, te puede convenir más la solicitud en persona en un banco o la solicitud de préstamos online o créditos online.
Los requisitos son los mismos que para cualquier otro préstamo o crédito por internet:
Por lo que respecta a la documentación:
Es potestativo de algunas entidades aumentar la edad mínima a los 21 o los 25 o pedirte que no estés incluido en ASNEF o que aportes un aval.
No todos los préstamos o créditos cuestan lo mismo. Da igual que los pidas en un banco o que los solicites online, cada entidad te pone unas condiciones y de ellas depende el total que abonas.
Piensa que los préstamos se piden a medio o largo plazo. En el caso de un préstamo de 60000 euros, la cantidad es demasiado grande como para que la puedas pagar en 2 o 3 años. Vas a necesitar entre 8 y 10. Por tanto, debes ser consciente de que esto incrementa los gastos.
Ahora bien, todo dentro de unos límites razonables, marcados por una buena elección. Por un lado, la de la prestamista donde lo solicitas, que te ofrezca una TAE baja. Por otro, los términos más adecuados para tu situación financiera, según tu contabilidad.
A continuación, te hablamos de los diferentes conceptos en los que te debes fijar a la hora de revisar ofertas, para saber cuánto cuesta tu préstamo o crédito.
Tanto bancos como financieras online aplican 3 tipos de interés:
Lo más aconsejable es elegir un interés fijo. Aunque no te beneficies de posibles bajadas en los tipos, también te evita posibles pérdidas. Por tanto, es un valor seguro y conservador.
Por el contrario, lo más arriesgado es el interés variable, más adecuado para aquellos que entienden mucho de economía y están muy al tanto de las noticias financieras.
El interés de un préstamo incluye 2 conceptos distintos:
La TAE es un concepto fundamental a la hora de comparar las ofertas de préstamos.
El motivo es que la pagas mes a mes y, cuando se trata de cantidades importantes, como 60000 euros, puede suponer varios miles de euros.
Cuanto más largo es el plazo de devolución, más caro te sale tu préstamo.
Puesto que cada cuota mensual incluye una parte de la TAE, esto significa que vas a pagar más intereses cuanto más tiempo tardes en abonar tu deuda.
A su vez, tanto plazo como intereses influyen en la cuota mensual.
Por tanto:
Hacer cuentas puede ayudarte a la hora de determinar un tiempo y una cuota mensual idónea para tus circunstancias. Piensa que es un compromiso a varios años y tienes que poder pagar tus cuotas, mes tras mes.
Elegir una cuota demasiado alta para ti, puede que, al final, te salga mucho más caro:
Así que piensa muy bien cuánto vas a tardar en devolver tu deuda, tal y como has hecho para elegir la TAE que te resulta más adecuada.
Está claro que sí, porque forman parte de la TAE, como ya te hemos explicado. No obstante, no son las mismas que en los bancos.
La comisión de apertura, por ejemplo, es propia de los bancos. Es muy raro que una fintech la cobre. Ahí te puedes ahorrar casi 2.000 euros (el máximo es un 3% sobre el importe que pidas).
Lo mismo ocurre con la comisión de estudio de tu expediente, que te la cargan los bancos.
Otras comisiones pueden ser por cancelar tu deuda de forma anticipada o por retrasarte en el pago, que solo las pagas cuando incurres en determinadas situaciones. Por tanto, no forman parte de la TAE.
Lo mejor que puedes hacer es revisar la letra pequeña de cada oferta, para saber cuáles aplica cada financiera.
Solicitar un préstamo de 60000 euros no debe tomarse a la ligera. Es una operación que tienes que analizar con detalle, en lo que respecta a las distintas ofertas y a tu situación personal.
No es igual enfrentarse a este tipo de financiación con un sueldo mensual elevado y sin deudas que con unos ingresos de 800€ y estando en ASNEF, por ejemplo.
Esto te supone elegir distintos plazos de entrega, soportar diferentes mensualidades, seleccionar financieras que acepten un mal historial crediticio y, por tanto, la TAE va a ser más elevada y los gastos, mayores.
Por eso, tienes que estudiar hasta el más mínimo detalle y asegurarte de que tomas decisiones basadas en razonamientos lógicos y no en primeras impresiones.
Puedes buscar en internet y encontrar una oferta que sea baratísima, que no te puedes perder. Pero entras en su página web y empiezas a desconfiar: no aparecen los datos de contacto, todo está mal redactado, falta información, las características no están claras… En definitiva, no te causa buena impresión y piensas que puede ser una estafa.
Es posible que tengas razón. De hecho, hay muchos hackers y personas mal intencionadas que, a través de este tipo de negocios falsos, se aprovechan de que estás en un momento vulnerable para intentan robar tus datos personales o pedirte dinero de forma fraudulenta.
Por eso, lo mejor que puedes hacer es utilizar una comparativa de préstamos realizada por un portal especializado. De esta forma:
Un ejemplo es la tabla comparativa de préstamos de 60000 euros que hemos preparado para que realices tu análisis, según los criterios más importantes: cantidad que presta, tiempo máximo para devolverlo, acepta ASNEF, TAE y TIN, etc. Puedes verla en la parte superior de este artículo.
A pesar de que todas estas empresas cumplen con la legalidad, cada una realiza la publicidad de la forma que le parece más adecuada.
De ahí que no todas destaquen los mismos conceptos ni utilicen las mismas técnicas de marketing.
Por eso, es tu obligación asegurarte de que cumplen todos los criterios que necesitas y de que tienes claro en qué consisten sus ofertas: entra en su página web y lee todo con detenimiento.
Lo mismo con el contrato, para asegurarte de que no pasas nada por alto.
Siempre vas a pagar TIN y TAE, por lo que el importe final adeudado va a ser mayor de los 60000 euros que solicitas.
Sin embargo, como ya has visto, elegir un plazo de devolución adecuado a tu situación puede ahorrarte mucho dinero.
Lo mismo que seleccionar la financiera que te ofrece la mejor TAE: esto es en lo primero en lo que te tienes que fijar a la hora de comparar cualquier tipo de préstamo o crédito.
Cuando solo intentas ahorrar dinero, sin pensar en nada más, seleccionas un periodo demasiado corto para tu préstamo de 60000 euros. Solo te centras en que te va a salir más barato, porque vas a pagar menos TAE.
No te das cuenta de que la cuota mensual es demasiado alta, con tu sueldo no puedes hacerle frente y, después de unos meses pasándolo mal, te empiezas a retrasar con los pagos.
Hablas con la prestamista, te concede prórroga en 2 cuotas, pero te cobra unos intereses de demora muy altos, así que el préstamo se encarece.
Y, al final, llega un momento en que ya no puedes con las deudas y dejas de pagar. No haces caso de los requerimientos de la financiera y, ante la falta de noticias, a esta no le queda más remedio que incluirte en ASNEF. De hecho, está a un paso de denunciarte por falta de pago.
La capacidad de endeudamiento recomendable está entre el 20% y el 30% de tus ingresos mensuales y debes tener en cuenta tus gastos habituales o si tienes cuotas de otros préstamos o créditos.
Como suele decirse, “las imprudencias se pagan”. Elige bien para evitar problemas mayores.
El importe total adeudado de un préstamo es la cantidad final que tienes que devolverle a tu financiera. Incluye todos los gastos de TIN y TAE.
Para saber el importe final, además del interés habitual, debes tener en cuenta el interés que te cargan por demora en el pago, junto con la comisión por el mismo concepto, además de la comisión por cancelación anticipada o por cambio de las cláusulas del contrato.
También debes añadir los productos que te obligan a contratar.
Son conceptos que encarecen el préstamo, pero no tienes por qué incurrir en ellos.
Cuando buscas información sobre financiación en internet, lees que las páginas web especializadas usan los términos de “préstamo” y “crédito” de forma indistinta.
Es posible que veas artículos que te hablan de “créditos de 30000 euros a 10 años” o “crédito de 60000 euros a 15 años”. En realidad, se refieren a préstamos.
Por tanto, no hay un gasto específico que tengas pendiente, sino que vas a recurrir a ese dinero a medida que te haga falta.
Lo bueno es que solo pagas por lo que gastas. Cuando pides un crédito de 60000 euros, puedes gastar solo 25000 y los gastos son solo por esos 25000.
Además, es una financiación renovable. En el ejemplo anterior, los 25000 se suman a la cantidad que no has gastado, una vez los devuelves. El préstamo no funciona así.
Según tu situación y para qué quieres el dinero, te va a resultar más cómodo y adecuado solicitar un préstamo o un crédito.
Las financieras online pueden ofrecerte multitud de opciones de financiación, adaptadas a tus necesidades: distintos importes (desde 100 euros), con ASNEF, sin aval, para personas físicas o para autónomos, etc.
Así mismo, te dan a elegir entre créditos o préstamos, 2 alternativas bien distintas con beneficios y objetivos diferentes.
Cada uno de ellos, tanto préstamos como créditos online, tienen varias modalidades, con unas condiciones más concretas de las que te puedes beneficiar según para qué quieras el dinero o cuál sea tu situación económica actual. Algunos de ellos son:
Ya has visto las consecuencias que puede tener elegir distintos plazos, solicitar préstamos con una TAE mayor o menor y el hecho de que tu cuota mensual varíe en función de ambos parámetros.
Ahora te lo vamos a explicar con un ejemplo, para que te queden las cifras más claras.
Para empezar, el importe de los créditos es menor que el de los préstamos. El motivo es que es una cantidad que se renueva, por lo que darte a crédito cantidades elevadas, como pueden ser 60000 euros, supone una deuda enorme y las prestamistas no asumen tanto riesgo.
Así que, en el caso de 60000 euros, debes pensar en préstamos personales. Aun así, no todas las entidades llegan a un máximo tan alto, por lo que vas a tener que mirar bien las ofertas.
La comisión de apertura es de 0 euros.
La TAE es de 10,15% y la cuota mensual es de 782,98€.
El gasto total es de 94.020,34€.
Es la misma prestamista, así que no te cobra comisión de apertura.
En este caso, la TAE baja a 7,98%. El motivo es que, al reducir el plazo, también reduces el riesgo de impago y, por tanto, te ofrecen mejores condiciones.
Esto te supone una cuota mensual de 1.207,99€ y un importe total de 72.530,48€.
Como puedes ver, la diferencia entre los 5 y los 10 años es de unos 22.000€ de gastos. El ahorro es muy importante.
Sin embargo, la cuota mensual aumenta en más de 400€. No todo el mundo puede permitirse pagar una cuota de 1.000€, porque su sueldo no es tan alto. Incluso aunque eches mano de todos los consejos para ahorrar dinero, no van a ser suficientes.
Por eso, aunque tu préstamo de 60000 euros te salga algo más caro, debes elegir una cuota mensual adecuada a tu bolsillo, que no te lleve al impago y a ASNEF.
¿Cuánto pagaría por un préstamo de 6000 euros?
Para saber cuánto pagas por tu préstamo, debes tener en cuenta la TAE y el plazo de devolución. Por tanto, el importe total varía de una entidad a otra, según las condiciones que te ofrece.
¿Cómo pido un préstamo personal?
Lo primero, debes analizar todas las ofertas disponibles. Para ello, puedes recurrir a la tabla comparativa que te hemos preparado al inicio de este artículo, con los mejores préstamos de 60000 euros.
Después, una vez analizadas, eliges la que más te conviene, según tus circunstancias.
Entras en su página web, te aseguras de que cumples con los requisitos necesarios y realizas una simulación de tu préstamo, para saber cuál es la cuota mensual y el plazo más apropiado.
Después, rellenas el formulario de solicitud y envías la documentación que te piden.
¿Es fácil conseguir un crédito de 60000 euros online?
Si cumples los requisitos exigidos por las entidades financieras, entregas la documentación que te piden y rellenas el formulario sin errores, conseguir un crédito online es una tarea sencilla.
Eso sí, el importe que te conceden no es tan elevado, porque es una operación de mucho riesgo. Cuando piensas en 60000 euros, tienes que recurrir a un préstamo.
¿Cómo calculo el coste de un préstamo de 60000 euros?
Para calcular el coste de tu préstamo de 60000 euros puedes recurrir a un simulador de préstamos, que es una calculadora que funciona seleccionando diferentes plazos y cuotas.